Literatura en todos los tiempos

Hay literatura en todos los tiempos. Se trata de una relación presente, constante e inagotable que no puede ni debe limitarse a circunstancias contextuales o temáticas.

Sobre
Miriam Suárez de la Vega

Doctora en Humanidades con Mención honorífica por la Universidad Anáhuac México Norte (UA), Maestra en Humanidades por la misma institución y Licenciada en Letras Latinoamericanas por la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), titulada en ambos casos con honores. Sus líneas de investigación son la hibridez literaria, los estudios de género y la literatura contemporánea. Desde hace más de quince años se desempeña como docente presencial y a distancia en áreas de Literatura, Humanidades y Comunicación, lo que le ha valido el reconocimiento institucional de las universidades donde ha colaborado como el Tecnológico de Monterrey, la Universidad Anáhuac y la Universidad Autónoma del Estado México.

Es verdad que las dudas están ahí a veces por mucho tiempo, hasta que de pronto algo impacta con tanta fuerza que resulta imposible seguir sosteniéndolas. Para mí, el 2020 fue el momento preciso para soltar los miedos, a pesar del entorno incierto y convulso que como humanidad enfrentamos, decidí salir de las paredes de casa a través de Mir Suárez, un espacio donde la literatura y las humanidades son protagonistas de una historia que las comprende despojadas de prejuicios, soberbias y presuntuosas intelectualidades. Ellas representan un principio de comunidad para quienes desean explorar, aprender, apreciar, conocer, profundizar y nutrir su jardín personal para florecer sus días guiados por voces apasionadas, profesionales, además de expertas.

Explora un mundo de posibilidades

¡GRACIAS POR TU VISITA!

No tengo absoluta claridad sobre cómo llegué al mundo de los libros. Mis recuerdos van a la primera infancia, quizá la curiosidad me hizo acudir a ellos para descifrar su contenido e inventarme historias, narrar sin siquiera entender el proceso. Luego, los habité como refugio en tiempos complejos y dolorosos hasta que de manera imperceptible se convirtieron en forma de vida. De mi niñez evoco una anécdota: Tendría como ocho o nueve años cuando en la Alameda central de Toluca se inauguró una Biblioteca Infantil y Juvenil que aún existe. Le pedí a mi papá me llevara, pasamos un par de tardes ahí, entonces descubrí, además del genuino placer, el camino de casa a la biblioteca para ir por mi cuenta cuando mis padres no pudieran llevarme. En alguna ocasión, sin el menor reparo, se me hizo fácil emprender camino a ese lugar que para mí representaba el único interés relevante de mis días, aunque no fui sola, me atreví a llevar conmigo a mi hermano menor y a un primo, a quienes poco les importaban los libros, ¡por fortuna vivíamos cerca y las calles de la ciudad entonces eran seguras o, al menos, lo fueron para nosotros aquel día! Borré de mi memoria la consecuencia de aquel acto, pero lo que sí conservo es la sorpresa casi inexplicable de mi familia ante una niña cuya travesura fue fugarse a la biblioteca.

PROFESIONALIZACIÓN

Una vez me encontré en momento de elegir mi destino académico, sin titubear opté por la Licenciatura en Letras Latinoamericanas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), donde pude vivir otra experiencia ya no sólo como lectora y amante de la literatura sino a través de una relación consciente del sentido artístico de ésta. De ese recorrido aquilato la oportunidad de estudiar en la Universidad de Valencia, España; país donde sumé lecturas entonces novedosas de autores poco conocidos en mi contexto. Antes de concluir los estudios de licenciatura y ya de vuelta en mi tierra, emprendí camino en la docencia donde vivencié un segundo placer que nuevamente me llevaría a la continua búsqueda por permanecer en el aula. Este es el motivo por el que cuando me piden los años de experiencia docente sumo veinte. Una vez titulada con honores comencé a laborar en instituciones como el Tecnológico de Monterrey y la propia UAEMéx, en ambos espacios primero de manera presencial y, posteriormente, en las clases de la modalidad a distancia. Cuando la inquietud volvió a aparecer hallé en la Maestría en Humanidades de la Universidad Anáhuac México Norte, un programa que habría de ampliar no sólo mi conocimiento sino mis expectativas, con la que estoy agradecida por incluirme hasta la fecha en su plantilla docente. De la Maestría al Doctorado hubo un paso enriquecedor. Ahora estoy aquí, segura de que los caminos son vastos, con absoluta creencia tanto en mi pasión como en mi profesión, lista para compartir, ampliar y demostrar que cuando la literatura acompaña los días la vida se ilumina.

LITERATURA PARA FLORECER TU VIDA

Literatura para acompañar tus días

Fragmento UNO

Así la luna: llena de letras y entrañas. La mía, oculta en un lugar que inunda ecos y dichos sin palabras.

Fragmento dos

Así la luna: llena de letras y entrañas. La mía, oculta en un lugar que inunda ecos y dichos sin palabras.

Fragmento TRES

¿Qué es la noche? ¿Cuál el verdadero color de la luna? ¿Qué es el profundo del cielo? ¿De quién es mi reflejo?

Escucho el suspiro de mi niña a mitad de su sueño, reconozco la complejidad de la noche, los temores, las pausas nocturnas. Parece que todo se aquieta, pero en el fondo se desata el otro yo, el lado oscuro y la parte perdida.

Me pregunto cuál es la ingeniería detrás de los sueños, si en ese fondo late otro corazón, me refiero a uno más puro cuya función no es bombear sino simplemente vivir.

¿De qué parte de la historia se alimenta ese corazón? ¿Quizá del lado bello que tendemos a olvidar?

¿Qué es la soledad?

Algo vibra en mis oídos, exceso de silencio. Murmullos de vacío transparente. Incógnitas ruidosas. Verdes goteos de filtraciones añejas.

El sueño aparece, habrá que atenderle, quizá así amanecer represente principio y no final.

Fragmento cuatro

Escritura horizontalHace tiempo que escribo en horizontal, me oculto tras las sombras nocturnas, me voy entre dedos de letras pequeñas trazadas para fundir ideas momentáneas, temores, franquezas, dolores, huidas.Recostada exploro posiciones horizontales para la escritura siempre con nostalgia por la línea corporal estereotipada del eterno escritor. En esta postura me debato con los silencios de cama y almohada…

Fragmento cinco

Por otro lado fluyen mis letras, en una especie de migración de meros pensamientos a ideas que buscan raíces. La escritura como acto de revelación de una parcela apenas explorada de mi consciencia. La palabra como imagen de transformaciones internas ocupadas en volverse permanentes, vigentes.

Mis manos adquieren la forma de puentes móviles que conectan procesos mentales inacabados, pero sonoros. Las letras del teclado son más un tablero de posibilidades para signar los movimientos mentales por donde camino los días o las noches.

Creo el espejo de mi yo interno, íntimo, obligado a exponerse desnudo e incierto de los ojos y las mentes que al paso habrán de recorrerlo.

Fragmento seis

Por otro lado fluyen mis letras, en una especie de migración de meros pensamientos a ideas que buscan raíces. La escritura como acto de revelación de una parcela apenas explorada de mi consciencia. La palabra como imagen de transformaciones internas ocupadas en volverse permanentes, vigentes.

Mis manos adquieren la forma de puentes móviles que conectan procesos mentales inacabados, pero sonoros. Las letras del teclado son más un tablero de posibilidades para signar los movimientos mentales por donde camino los días o las noches.

Creo el espejo de mi yo interno, íntimo, obligado a exponerse desnudo e incierto de los ojos y las mentes que al paso habrán de recorrerlo.

Fragmento siete

La lluvia es la suma de silencios que al caer terminan por decirse.

Fragmento OCHO

Me llamo Miriam Suárez de la Vega, tengo una E mayúscula en mi nombre herencia de mi abuela paterna (la imagen que concibe mi mente cuando de admiración se trata). Las letras me han guiado desde la infancia en forma de salvación, de sitio solitario donde aparezco y desaparezco sin necesidad de explicaciones. Leo, escribo, comparto. La mitad de mis años los he pasado frente a grupos, primero de preratoria, luego de licenciatura, después de posgrado; en una búsqueda continua por apreciar la literatura, más bien la vida y su opuesto. Hoy me abro a este espacio en que creo será posible coincidir ¿con quién?

Como escribes dice todo de ti

La corrección de estilo es la revisión exhaustiva de textos con el interés de enviar un mensaje claro a los lectores, sin importar su perfil. Implica la aplicación morfosintáctica para lograr precisión léxica, de signos ortográficos y de puntuación para la concordancia entre ideas, también se eliminan ambigüedades u oraciones confusas. Asimismo, se amplía la riqueza expresiva y la estructura completa del escrito.

Como escribes dice todo de ti